El tiempo pasa, pasa, pasa.
Yo corro entre pájaros cautivos,
mientras tus luces se alejan, se alejan.
En tu ausencia te escribo con mis atardeceres de otoño,
con estas manos y con mi manera de andar,
Te sueño entre copas rotas,
Te oigo a través de mis vidrios empañados.
A veces te grito en medio de la noche
que tus luces no se alejen, que no se alejen
y luego te mato.
Te mato con bocanadas de cielo.
Yo corro entre pájaros cautivos,
mientras tus luces se alejan, se alejan.
En tu ausencia te escribo con mis atardeceres de otoño,
con estas manos y con mi manera de andar,
Te sueño entre copas rotas,
Te oigo a través de mis vidrios empañados.
A veces te grito en medio de la noche
que tus luces no se alejen, que no se alejen
y luego te mato.
Te mato con bocanadas de cielo.